El COVID-19 sigue entre nosotros. Si bien ya no es la enfermedad peligrosa del comienzo, el virus se sigue replicando de forma más contagiosa con las nuevas subvariantes de Ómicron. Y luego de cursar la enfermedad, puede tener repercusiones en todo el cuerpo, sobre todo tener complicaciones en el corazón, los pulmones y hasta el cerebro)