La demostración de fuerza que pretende ejercer Javier Milei sobre el Congreso al vetar, de manera total, la ley que mejora los haberes jubilatorios tendrá efectos pírricos. Aunque la oposición no alcance los dos tercios de los votos para insistir en la norma, tanto críticos como dialoguistas advierten que semejante mazazo caldeará todavía más ánimos, le complicará al Gobierno la sanción de las leyes por venir y le abrirá la puerta a nuevas y más agresivas iniciativas opositoras.