Como bien dijo Luis Landriscina en sus palabras de despedida a Omar Moreno Palacios; “hablaba de lo que sabía”, pues en lo que tiene que ver con la Difunta los que saben son los fieles, los que creen en ella. Aquellos que cuando ya no había más nada para esperar, confiaron en su intercesión ante Dios para aliviar la angustia que su cruz les provocaba.