PORTO ALEGRE.- Una de las “casas bombas” encargadas de devolver el agua de lluvia al río Guaíba, en Porto Alegre, se averió el viernes por la mañana, y el torrente inundó las calles del centro histórico de la capital de Rio Grande do Sul, estado del sur de Brasil afectado por una grave inundación que ya provocó 31 muertos y 74 desaparecidos.